Principios de la Organización

#1 No importa cuanto hagamos, nunca terminaremos ⏰

Te invito a repetirte esto en voz alta, cual mantra. Si querés tatuártelo, también podés! Jaja De verdad, es liberador.  

Siempre habrá nuevas tareas, la casa volverá a ensuciarse, la heladera a vaciarse. Cuando alcancemos una meta, acto seguido aparecerá otra, y otra. Aunque dejemos en cero la lista de tareas de la oficina, al día siguiente volverá a llenarse de cosas para hacer. Podrás llevar a cero tu casilla de mail (de hecho, es algo muy gratificante ja), pero tarde o temprano volverán a llegar mails o vos vas a volver a enviar. 

Entonces, una de las bases de la organización es no obsesionarnos con tachar tareas o pendientes solo por la descarga momentánea (y adictiva) de dopamina que nos genera la sensación de «completar un ítem». Ellos solo están para ayudarte a mantener el foco y avanzar en tus metas y compromisos, pero no es una carrera contra el tiempo ni una competencia de «tachabilidad». Menos de hipotecar tu paz mental al hecho de cuántos pendientes hayas completado. 

Mientras estemos viv@s, siempre habrá cosas por hacer, asuntos que resolver. La lista NUNCA será cero. Y si lo es, será solo por un ratito. Aceptar que tenemos límites (de horas, de energía, de recursos, de capacidades) y que aunque pongamos lo mejor de nosotr@s, aunque deleguemos el 90% de nuestras tareas o solo pongamos un pendiente al día, nunca podremos hacer todo lo que nos gustaría o deberíamos.

Y eso es una buena noticia: significa que podemos elegir, simplificar, priorizar aquello más significativo y trascendente para nosotr@s, no necesitamos completar todo. No es lo mismo una vida PLENA que una vida OCUPADA. 

#2 Lo que se gestiona no es el tiempo, sino la energía y la atención ✨

Tod@s tenemos 24 horas al día, sin excepción. Vos, yo, el Papa, l@s presidentes, Messi , Beyonce, tu gat@ o perr@… tod@s. Entonces ¿Por qué hay personas que parece que el día les rinde muchísimo, que van como flotando entre actividad y actividad, que incluso les sobra tiempo para descansar y disfrutar, y otras que corren constantemente tras las urgencias, sufriendo y deseando que su día tenga 55 horas para poder llegar con todos sus pendientes?

Si hay un recurso que nos iguala, es el tiempo. Por lo tanto, el tiempo no se gestiona porque es una constante, es una unidad de medida, como el metro o el litro. No lo podemos devolver, comprar, detener, sumar ni restar. Entonces, lo único que sí podemos gestionar es cómo administramos la ENERGÍA y el FOCO durante esa constante que es el tiempo.

Es decir: cómo gestionamos el flujo de actividad-descansos, qué actividades y tareas priorizamos, si la hacemos de forma eficiente o no, cómo aprovechamos nuestros picos y valles energéticos a lo largo del día, si creamos rutinas para todo aquello operativo (como por ejemplo la limpieza o las tareas repetitivas del trabajo) para que sea lo más ágil y liviano posible. 

A su vez, no todas las horas se construyen igual. La forma en que gestionemos nuestra atención determinará la calidad. Pensá por ejemplo en un día que trabajas una hora completamente enfocad@, prestando 100% de atención a lo que estabas haciendo y totalmente inmers@ en la tarea. Seguramente lograste avanzar de forma fluida y cuando terminaste sentiste que habías hecho algo productivo y habías aprovechado bien el tiempo. Estuviste en estado de flujo.

Ahora recordá algún momento donde a pesar de dedicarle 4 o 5 horas a algo, estabas revisando tu Instagram cada 2 minutos, o en medio recibiste un llamado, o cortaste la actividad varias veces para ir al baño, porque te sentías mal o cansad@. A pesar de dedicarle un montón de horas más que en el ejemplo anterior, no lograste avanzar ni un cuarto.

Por eso, te invito a comenzar a pensar tu organización en términos de foco, de prioridades, de ciclos energéticos, de eficiencia y estrategia. Y no tanto en términos de horarios, tiempos, calendarios externos. Empezar a integrar estos dos aspectos, complementarios y necesarios. 

*Aprovecho este párrafo para recordarte nuestro seminario «Entrena tu atención» donde aprenderás a dominar tu foco, crear bloques productivos en tu día a día y gestionar distracciones externas e internas.

× ¡Hola!